La pregunta ilustra este articulo puede hacer una boutade; hace un año, hubiese parecido una herejía. Desde que llegó, en el mercado de invierno de la temporada 2021/22, Reinildo se convirtió en indiscutible en el lateral izquierdo, sin necesitar la llamada ´mili´ de Simeone; aún en los peores momentos (principio de la temporada 2002/23) Reinildo evitó que el desastre defensivo y grupal fuese aún mayor.
Pero, desde que se lesionó, hace ya cerca de un año, Simeone ha ido evolucionando y perfeccionando un esquema 5-3-2 en el cual no está del todo claro si el mozambiqueño tiene cabida; insisto, aunque pueda parecer una boutade. En ese 5-3-2 sus perfiles serían el de central por la izquierda o el de carrilero por esa misma banda: sus ínquilinos´ actuales´, Hermoso y Lino (hasta su lesión), respectivamente, si nos atenemos a los titulares actuales. Antes de ir a las ventajas, hagamos de abogado del diablo y vayamos a los inconvenientes, siempre y cuando Simeone apueste por mantener el 5-3-2.
Si reemplaza a Lino y se la sitúa como carrilero izquierda, es obvio no tiene suficiente capacidad combinativa y llegada al área, puestos a atacar; si se le pone como central zurdo, se pierde a Hermoso y, puestos a ser defensa puro, mil veces Reinildo pero hay que tener en cuenta una cuestión táctica, nada desdeñable en este Atlético: Mario Hermoso, aunque se precipite muchas veces, tiene una gran salida de balón y en el entramado táctico ha montado Simeone en los últimos meses, en fase ofensiva, Mario Hermoso (con Witsel -poco hablamos de él- cubriéndole las espaldas) actúa como cuarto centrocampista aprovechando, como decimos, su gran manejo de la pelota.
Otra cosa es que, con la vuelta de Reinildo, Simeone optase por volver a un 4-4-2, con el mozambiqueño de lateral puro y, dado el esquema, con menos obligaciones para subir toda la banda. Eso permitiría, además, al Atlético, tener un cuarto hombre en medio campo, cosa se ha echado en falta en muchos partidos.
¿Forzará la vuelta de Reinildo y, que no se olvide nunca, la marcha de Carrasco, clave en el 5-3-2, a volver al 4-4-2? Si se permite opinión, uno lo probaría. Con Reinildo a bordo, claro.